martes, 5 de abril de 2011

Más allá de los prejuicios: la economía como herramienta del periodista

Por Alejandra Pedroza Marchena

Justo termina la clase, la maestra toma sus cosas y se despide. En la puerta del aula el siguiente profesor está por entrar. Sobre el pizarrón se dibujan los temas revisados: narrativa periodística, estrategias de redacción, y demás. Los alumnos encantados con lo que acaban de analizar esperan mientras digieren los contenidos y saborean sus opiniones: estudian periodismo. Entra el profesor en turno y desde el frente enlista los conceptos a revisar esa clase: porcentajes, incremento, decrecimiento, precios… El encanto se apaga.

Los ánimos decayeron en ese salón y muchos de los estudiantes no entienden por qué. Lo único que conciben son esas desganas a los términos que el profesor plantea y lo abrumador de la dureza de los números. La clase del momento es Periodismo Económico y, de pronto, gran parte de los alumnos cometen una huída mental.

¿Qué pasa con muchos periodistas (y aspirantes a serlo) que al tratar vertientes económicas y financieras aparece una especie de repulsión automática? ¿Casualidad que a varios les suceda esto? La respuesta es sencilla: quienes nos formamos en periodismo portamos una tendencia a temas sociales y buscamos desembocarlos a través de letras. Nuestra perspectiva es conceptual y en el momento en que se nos presentan temáticas económicas, regidas por números, se transgrede la visión descriptiva que tenemos del entorno. Nos cuesta analizar con cifras.

Sin embargo, no todo tópico económico se tutela estrictamente de números. Las sociedades emergen y se desarrollan a través del intercambio de bienes, la economía entonces está intrínsicamente ligada a la vida de una sociedad y más, se filtra en todos los campos de nuestra vida cotidiana.

En ese sentido, se puede hacer un retrato de la realidad, desde sectores diversos bajo la óptica económica. Es posible hablar de cultura, ambiente, educación, ciudadanía y demás enfoques periodísticos sin hacer a un lado la economía. O más bien, ejercer el periodismo económico con una fórmula en donde se combinen visiones humanas o cuales quieran que nos apasionen. Porque para todo habrá datos y cifras que nos den abasto.

Además de su presencia rutinaria, la economía tiene matices universales. Esto debido a que todos los países vivimos los mismos fenómenos económicos (aunque en niveles distintos) y en ocasiones son compartidos (me refiero a tratados, comercializaciones, etc), lo que nos lleva a un vínculo entre naciones. Como periodistas, es pertinente aprovecharnos de estas ventajas, exprimir los datos concretos que nos brinda sobre fenómenos sociales y así mejorar la información obtenida.

Finalmente, para que esta nueva fórmula de explotar la economía en combinación con los temas que nos interesan sea vigente, es preciso comenzar desde las aulas de los periodistas en construcción, donde se forje la idea de una economía al margen de los prejuicios de la hostilidad de los números.

Ser un periodista económico

Por Guadalupe Sofía López Bejarano

La combinación de números y letras no sólo se representa en las ecuaciones, también, se puede exponer en la redacción de una noticia, reportaje o perfil sobre economía; pero ¿quién se encarga de analizar los datos y presentarlos a la personas ya sea en radio, televisión, prensa o Internet?

Antes de que se profesionalizara la carrera en periodismo “entre finales del (siglo) XIX y principios del (siglo) XX”, las personas encargadas de cubrir los asuntos económicos en un medio de comunicación tenían preparación en distintas disciplinas como economía, leyes, letras y política, según el estudio "La Formación del Periodista Económico" realizado por Ángel Arrese y Alfonso Vara.

Actualmente, en las facultades de periodismo se imparten materias para que los alumnos se especialicen (en) presentar información económica y al egresar de la carrera estén capacitados para escribir con un lenguaje sencillo sobre dicho tema.

Lo cierto es que aprender a contar historia económicas no es una tarea fácil, pues el periodista tiene que buscar la manera de que a las personas no les resulte tedioso o abrumante ver muchas cifras.

Francisco Esteve Ramírez, en el libro Periodismo especializado, retoma el estudio "Fundamento de la Formación Periodística Especializada", para mencionar los 3 niveles de la de la redacción económica: señala que el primer nivel corresponde a la “divulgación informativa”, el cual se redacta para un sector amplio no especializado; el segundo nivel es “especialización media”, en el cual los mensajes son para personas que ya tienen conocimiento sobre los temas económicos, esta información se divulga en los suplementos sobre economía; el tercer nivel es “especialización alta”, que se difunde en medios de comunicación especializados, es para personas que conocen más sobre los temas.

Sin embargo, no podemos salir de la universidad y entrar a trabajar a un medio como especialistas: tenemos que empezar a subir escalones para ganarnos un lugar.

Más que la enseñanza de las universidades y si resultan o no viables algunos programas de estudio, se necesita personas arriesgadas y que le apuesten a inmiscuirse a esa especialización periodística, que se apasionen por contar historias con algo más que letras y que no le teman a equivocarse, sino que practiquen para que cada día dominen más el tema.

¿Periodista o economista?

Por Gabriela Cervantes

Se dice que tiempo atrás los espacios económicos dentro de los medios los llenaba un abogado, político o economista. Pero en la actualidad debido a que la información sobre los temas económicos ha cambiado y día a día adquiere mayor importancia, “un gran número de profesionales de la información, directa o indirectamente, han tenido que experimentar las exigencias de escribir sobre asuntos económicos, o enfocar buen número de temas desde perspectivas económicas”, como lo menciona Bill Saporito.

Pero al saber esto, no está de más pensar qué es mejor: ¿un articulo económico redactado por un periodista, o uno hecho por el economista? Tomando en cuenta la experiencia del economista en el tema y la que tiene el periodista como el especialista de la elaboración y difusión de la noticia.

Podremos encontrar distintas opiniones, quizá alguno piense que cualquiera que sepa del tema puede escribir, algunos otros dirán que el periodista económico es uno más, que no necesita una formación especial, pero como parte fundamental se tiene que tomar en cuenta que así como el economista quizá no sabrá redactar de la mejor manera, “ser periodista puede ser necesario, pero no suficiente”.

Inclinándome a la idea de que es el periodista quien tiene que hablar de economía, es necesario tener en cuenta la formación completa y profesional en el área a desempeñar. Otra opción con la cual no estoy del todo de acuerdo es que el economista al redactar la nota tenga previo conocimiento y formación periodística.

A razón de lo anterior, el periodismo económico ha comenzado (aunque no de manera establecida) a tomarse en cuenta como parte de la formación académica de los estudiantes en periodismo, lo cual deja ver la importancia que tiene dentro del plano laboral de todo periodista, ahora faltará analizar la reacción de los estudiantes ante dicha especialidad.

Hablemos de...

Por Gerard Zamora Alfaro

¿Por qué y cómo ser un periodista económico? Porque un periodista supuestamente debe de “saber de todo” y, sobre todo, un periodista económico debe saber entender y comprender toda aquella información económica que consiga, le llegue, posea, etcétera. Debe comprender esta información para poderla explicar de la mejor manera posible a le gente que no entiende los tecnicismos de los especialistas, pero que desean saber de qué manera afectan los cambios en la bolsa, la inflación, etcétera, en su economía familiar y/o personal.

Entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX el periodismo económico era ejercido por profesionales como economistas, políticos, contadores, hasta abogados, y en la actualidad hay muchos medios que aún no cuentan con periodistas especializados en esta área (economía), y por eso a pesar de que se apoyan en gráficos y tablas para explicar los noticias y temas económicos, no son explicados correctamente para que los entienda “toda la población”, como si solo hubieran sido escritos para especialistas.

Existe prensa que se especializa en información económica y financiera, sin embargo se debe de tener también el interés por el tema y la noticia, ya que con nuestra forma de expresar y dar a entender la noticia y los datos no solamente podemos afectar o incidir en las decisiones de la gente que se especializa en estos temas y esta tipo de prensa, sino también en la población general. Por eso, un periodista económico debe de estar preparado en su área para cualquier tipo de medio, ya sea prensa escrita, radio, televisión o Internet.

Esto es porque creo y propongo que el periodista de economía debe ser una persona especializada en la materia, para que su lenguaje sea claro y que las cifras que se proporcionen en la información las pueda digerir cualquier persona, sea especialista económico o no, y así cualquier ciudadano tenga mayor claridad de información para que el ciudadano pueda elegir las opciones que mejor le parezcan (con más y mejores argumentos) necesarias para el tratamiento de su economía familiar y/o personal.

Ni economistas, ni investigadores: periodistas

Por Andrea Yolanda Martínez Parrilla

Si el periodismo generalista conlleva a dar cuenta de un hecho, por su parte, el periodismo especializado, además de contar un hecho da explicaciones del mismo.

Javier Fernández del Moral, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid, señala que en los inicios del periodismo especializado eran los colaboradores y no precisamente periodistas los encargados de redactar.

La situación no ha tenido un cambio significante. Aún en la actualidad, los especialistas en determinadas materias son los periodistas especializados. No obstante, en pleno siglo XXI, Texema Ramírez de la Piscina afirma que la demanda y los nuevos soportes tecnológicos han acelerado el proceso de especialización, pues ahora el lector quiere saber “las cosas a detalle”. De aquí la importancia de que existan periodistas especializados.

El periodismo especializado surge con dos principales temáticas: la política y, posteriormente, la economía. Según Fernández del Moral, la prensa escrita se encaminó a ello para “competir” con la radio y la televisión, en la búsqueda del análisis y la interpretación.

Y a todo esto, ¿qué es el periodismo especializado? Antonio López de Zuazo alude a la audiencia para dar una definición, pues sostiene que el periodismo especializado es aquel que se ofrece a un público concreto. Esta definición poco abona, pues el periodismo especializado no necesariamente es para un público especializado, más con las temáticas complejas que incluye el periodismo económico. Por tanto, habría que entender por periodismo especializado lo que Romano V explica como las actividades que refieren a un área concreta del periodismo.

La economía es un punto fundamental del periodismo especializado, pues está presente en la vida diaria. El dilema principal es cómo comunicar este tipo de acontecimientos, pues representan un reto tanto para el periodista como para el receptor. Ramón Carrión atribuye principalmente a los periodistas la situación actual del periodismo económico, pues les hace falta claridad en los mensajes.

Lo importante del periodista económico es que tenga claro que no es ni economista ni investigador, simplemente es un periodista. Esto lo argumenta Carlos Prado, quien además explica que debe existir un punto de equilibrio al tratar un tema económico, pues el lenguaje no tendería a ser vulgar ni debería caer en el “academicismo puro o en el tecnicismo del análisis económico”.

Es por eso que un periodista económico tendría que pensar en su público. Para Esteve y del Moral, hay tres niveles de especialización en el periodismo económico y directamente se relacionan con la audiencia: divulgación informativa, que implica producir información para receptores no especializados; la especialización media, dirigida a un público especializado y la especialización alta, que requiere de un tratamiento más técnico debido a que la reciben los sectores más interesados.

Si bien es cierto que en el periodismo económico los retos a los que se enfrenta el periodista generalmente son resueltos en el camino, la solución está previamente a ello. Juan Pablo de Villanueva (q. e .p .d.) quien fuera presidente-editor del Grupo Negocios, propietario de La Gaceta de los Negocios, entre otros puestos en medios de comunicación españoles, sugiere estudiar más, pues “si solo se estudia periodismo es poco”. De Villanueva, agrega que la principal cualidad de un buen periodista económico es que sea un buen periodista.

Es importante que un periodista económico pueda interpretar la vasta información cuantitativa y que se actualice constantemente, pues los números son cambiantes minuto a minuto. Ello, servirá para que la información no sea “subsidiada”, es decir, idéntica a la que procede de las fuentes. Asimismo, el periodista económico no debe quitarse su papel de periodista general y el hecho de que sea un periodista especializado, no lo exime de conocer sobre otras temáticas.

Es por eso que se necesitan periodistas y no investigadores, ni economistas. La formación de un periodista económico está directamente relacionada con el campo laboral, pues abre paso para que se ocupen puestos que actualmente dominan los especialistas. Sí se puede aprender en el camino, pero si un periodista aprende antes, lleva ventaja al resto.

Si las escuelas en las que se oferta periodismo o ciencias de la comunicación, no preparan al periodista económico, la responsabilidad del periodista, simplemente es su preparación.

Economía, verdadero reto para el periodista

Por Paola Denise Gil Medrano

Economía es un concepto que nos atañe a todos pero al que irónicamente la mayoría parece tenerle “asquito” o repudio. Y para muestra basta un botón: regularmente podemos observar a los lectores pasar desapercibidas las mínimas páginas de un periódico que contienen información de este tipo, o los gráficos de relleno en los programas televisivos a los cuales la audiencia le basta el picar un botón de su control remoto para alejarse de lo inentendible.

Y cómo no pasar estos hechos si la información que de ello se divulga tal parece ser simplemente otro idioma para el común de la gente, parece que esta va dirigida a sólo unos cuantos empresarios y estudiosos de ello.

Los noticieros y periódicos al referirse a temas económicos más parecen libros matemáticos por el tumulto de números con el que se rellenan.

En fin, múltiples cifras, síndromes de declaracionitis y poca contextualización o explicación de los hechos es lo que se le brinda a la audiencia.

Pero justo sobre la marcha en mi intento de incursionar en el terreno de lo económico me voy dando cuenta del gran trabajo y varios retos que enfrenta el periodista económico.

El periodista económico aparte de tener las cualidades de un buen periodista y de entender los sucesos económicos debiera ser capaz no solamente de saber acomodar datos y conseguir entrevistas con aquellos magnates sino de poder redactarlo a manera que lo entienda desde un ama de casa hasta el más importante empresario.
Para ello debe contextualizar el hecho (que bastante falta hace en todos las ramas del periodismo) y poder aportar ejemplos claros y gráficos digeribles para el mejor entendimiento.

Pues los sucesos económicos son tan importantes como los demás temas informativos ya que afectan de cualquier manera a todos y al tener mayor conocimiento sobre ellos, la audiencia puede tomar decisiones en la repercusión de su propia economía.

Por otra parte, la práctica del periodismo se ha vuelto en la actualidad un mayor reto para quienes lo ejercen, ya que el contexto actual en el que se practica implica nuevos medios de comunicación que obligan a los periodistas a convertirse en reporteros multimedia para poder llegar y lograr un impacto en las audiencias.

Según Jhon V. Pavlik, en su libro Periodismo y los nuevos medios de comunicación, desde finales del Siglo XX el periodismo comenzó a revolucionar, empezaba a contar con características como noticias omnipresentes, acceso global a la información, cobertura instantánea, interactividad, los contenidos en multimedia y la extrema personalización de los contenidos.

Ahora debemos tomar en cuenta que el periodista económico, aunado al entendimiento de sucesos económicos y de tratar de lograr parecerse a un docente para la audiencia, también debe enfrentarse a poder presentar la información de una manera creativa, pues al hablar de la audiencia actual es hablar de un público fugaz, migrante y selectivo.

Así que es una tarea nada fácil a la que el periodista debe enfrentarse y para ello debe olvidar al periodista vendido ante los grandes consorcios, olvidar al simple vocero y regresar un poco a lo que algunos llaman la visión romántica de la profesión: “ser aquel árbitro social”.